Rebellion banco

El desbordante desarrollo de nuevas tecnologías de la información, unido a la no menos desbordante capacidad del ingenio humano para dar utilidad a estas tecnologías, está provocando la intensa revolución que se está viviendo en el mundo de las aplicaciones informáticas al servicio de las finanzas. Así, opciones, proyectos, mercados y productos impensables hasta hace poco, se abren paso de la mano de estas nuevas tecnologías. En este artículo analizaremos la aparición del neobanco español Rebellion.

Tanto es así que la banca tradicional, viendo lo que se avecina, centran sus esfuerzos en dotar a sus productos de estas nuevas tecnologías en un intento de no quedarse atrás y ser superados por los nuevos tiempos. Bien desarrollando productos y líneas nuevas, bien adquiriendo empresas fintech que ya las hallan desarrollado.

Aunque el desarrollo y creación de estas empresas pueda ser en su mayoría algo que nos viene de desarrolladores extranjeros, lo cierto es que en nuestro país existen ya un buen número de empresas fintech desarrollando productos altamente interesantes.

Rebellion Pay pertenece a esta categoría. Fundada el año pasado y participada mayoritariamente por Gala Capital (lo que da una idea de su capacidad de crecimiento), Rebellion se ha convertido en la primera fintech española en conseguir una licencia para operar como entidad financiera (no como banco, sino como Entidad de Dinero Electrónico) a nivel europeo. En solo diez meses ha logrado un permiso en Lituania para operar como Entidad de Dinero Electrónico (EDE) a nivel comunitario, una licencia que está un peldaño por debajo de la de entidad financiera, que le permitiría operar como un banco cualquiera. De momento solo N26 es un neobanco con licencia bancaria completa. Monzo y Revolut son aún EDE, como Rebellion. El camino para el Google Bank y otros gigantes de fuera del sector cada vez queda más claro: ofrecer servicios financieros a sus usuarios.

Al frente del proyecto se encuentra Sergio Cerro, 37 años y licenciado en Empresariales, que ya tuvo su primera incursión en el mundo empresarial con Mimento, un pequeño proyecto basado en el envío por correo postal de las fotos del móvil que no terminó de cuajar. Ahora con Rebellion el objetivo es mucho más ambicioso. El importante patrocinio de Gala Capital, le ha permitido hacerse con una licencia de entidad de dinero electrónico que le permitirá habilitar que cualquiera pueda pagar en cualquier sitio con la tarjeta de Rebellion, o a través de Google y Apple Pay, hacer transferencias e incluso domiciliar la nómina.

El funcionamiento se materializa a través de una tarjeta virtual, vinculada a un número de cuenta (con IBAN) y gestionada a través de una aplicación móvil. Esta tarjeta virtual está pensada para la compra de productos y servicios por internet y para su uso en aquellos establecimientos donde no sea necesario disponer de una tarjeta física para realizar compras. Esta tarjeta será compatible en todos aquellos comercios que acepten tarjetas Mastercard.

Dicha tarjeta será de prepago y sólo podrá ser usada si dispone de saldo. Éste deberá ser provisto por el usuario mediante recargas (cantidad mínima de 10 euros), llevadas a cabo desde la aplicación móvil mediante el uso de una tarjeta bancaria en vigor que disponga de fondos.

Hasta aquí el coste de este servicio, tanto por su uso, como por las recargas llevadas a cabo es de 0 euros. En principio se podrá recargar la tarjeta hasta con 250 € al día, con un tope de 20 recargas diarias y un mínimo de 10 € por recarga. Se podrá gastar hasta 250 € en un día, que coincide con el máximo en un mes. Y la cantidad máxima a recargar es de 2.500 € en un año. Estos límites son ampliables sin coste alguno. Los máximos serían recargas de hasta 6.000 € de recarga al día (con 10.000 € de tope de recarga mensual) y un tope de gasto de 600 € al día y de 1.500 € en un mes.

La aplicación sólo conllevaría gastos para el usuario en el caso de que éste quisiera hacerse con una tarjeta física, que le permitiría, tanto pagar en comercios que no acepten tarjetas virtuales, como sacar dinero de cajeros automáticos. Entonces se activaría un servicio de suscripción que funcionaría mediante el pago de una cuota de 2,99 € al mes.

Lo que no se podrá hacer con este producto es acceder a crédito o a préstamos. Ya que la licencia obtenida por la entidad no alcanza este supuesto.

Lo que está claro es que esta aplicación está pensada para intentar cubrir las necesidades de una parte del mercado tradicionalmente desatendida por las entidades tradicionales. El acceso a medios de pago de los menores de edad o los jóvenes que aún no se han incorporado al mercado de trabajo es muy dificultoso. Sobre todo, teniendo en cuenta la gran cantidad de productos y servicios pensados para este colectivo, que tienen que echar mano de un adulto para poder acceder a estos productos.

A nivel operativo Rebellion espera operar a pleno rendimiento en unos meses, centrándose por ahora en España y Portugal. Si todo va bien, para 2021 intentarán entrar en México y Argentina, donde la penetración bancaria es más débil que en Europa y, por tanto, posiblemente exista más campo de acción. Por el momento cuentan con 15.000 clientes, pero hay días que captan 500 usuarios, normalmente a través de anuncios en Instagram y Facebook.