Opinión de CreditoMas

Creditomas ofrece micropréstamos de tramitación rápida de hasta 900 euros a devolver en un plazo máximo de 30 días cuyo fin es poder cubrir necesidades puntuales de liquidez y con un abono en cuenta que en la mayoría de los casos se produce a las 24 o 48 horas de la petición ya que hasta este momento no utilizan transferencias inmediatas y solo se benefician de recibir en el día los solicitantes que tengan cuenta en la misma entidad con la que ellos operan.

Además de ofrecer una cuantía algo superior a algunas de las empresas que ofrecen minicréditos similares, los préstamos concedidos también ofrecen posibilidad de prórroga.

En todo caso, sus productos, concedidos por la empresa Sistemas Financieros Móviles SL son una herramienta financiera para uso ocasional y no para cubrir problemas de financiación a medio o largo plazo.

Creditomas ofrece minicréditos de hasta 900 euros que permite solventar necesidades puntuales de liquidez más elevadas. Esta mayor cantidad, unida a que el plazo máximo es de tan solo 30 días, hace que este tipo de préstamos se importante asegurar que puedas cumplir con los compromisos suscritos cuando se solicitó para evitar un sobrecoste importante que se sume a los intereses elevados que ya se abonan por este tipo de financiación. Igualmente solicitar una prórroga significa incurrir en una serie de costes que lo hace desaconsejable a no ser que no puedas hacer frente al pago y tengas certeza que con esos días si podrás devolver el capital y los intereses.

En cuanto a la operativa es sencilla y se basa fundamentalmente en comprobar su solvencia en ficheros de crédito y en los propios movimientos de su cuenta bancaria a la que dará permiso de acceso de forma online. Eso sí el plazo de reembolso no es de los más cortos. Salvo que tengas cuenta bancaria en alguna de las entidades con las que opera actualmente recibirás el dinero en 24 a 48 horas.

Por último, ten en cuenta que la empresa que concede el préstamo, Sistemas Financieros Móviles SL, no es ni un banco ni un establecimiento financiero de crédito y por tanto ni su actividad, ni tampoco sus productos están regulados o supervisados por el Banco de España. Aún así, la solicitud de estos productos genera un compromiso de pago (contrato, factura) con las mismas obligaciones legales que si lo hubiera concedido un banco.