A la hora de invertir en un proyecto de crowdfunding hay que preguntarse y analizar qué es lo que buscamos con esta inversión. Podemos buscar una mayor rentabilidad para nuestro dinero, colaborar altruista en una labor social o participar en algún proyecto en el que en lugar de recibir una retribución dineraria percibamos otro tipo de recompensa material si se consigue su éxito. Por supuesto, el que busca la financiación también debe saber muy claro que es lo que desea entregar. Por ejemplo, si solo busca financiación en mejores condiciones de las que puede ofrecerle un banco buscará un préstamo en el que devolverá capital y sus intereses. Pero muchas veces o no se quiere o no se puede devolver rápidamente esta aportación económica. Puede que lo que se busque es desarrollar un producto o servicio y que la mejor recompensa será devolver este mismo a la persona que apostó por él.
Este es el crowdfunding de recompensa, un micromecenazgo moderno en el cuál no hay una sola persona detrás sino muchas personas que con pequeñas aportaciones que ayudan a llevar a cabo el proyecto.
Las claves del crowdfunding de recompensa
Como todos crowdfunding, el primer paso es poner en contacto quién desarrolle la idea con quién quiera invertir en ella. El primer reto es que la persona especifique mucho mejor su proyecto si lo comparamos con otras formas de crowdfunding. Si es cierto, que también cuando se busca financiación clásica a través de un préstamo monetario también hay que explicar muy bien en que consiste el proyecto y acompañarle siempre un plan de negocio o similar en el que quede claro la viabilidad económica, pero en el crowdfunding de recompensa incluso es más necesario. No hay que olvidar que, en el primer caso, los pagos y devolución del préstamo se producen tan pronto como arranque la operación. En el crowdfunding de recompensa sólo al final, y si el desarrollo del producto o servicio ha sido exitoso.
Por ello, la plataforma en la que se publicite el proyecto juega un papel fundamental. Esta es la primera que analiza la viabilidad y solicita el emprendedor toda la información disponible, incluyendo en muchos casos un boceto o prototipo del producto o servicio a desarrollar. Este es de lo más variado. Puede ser una obra artística o como cada vez sucede más un producto tecnológico, desde un videojuego a una Tablet. Pero no todos los proyectos con recompensa son iguales. Los proyectos con éxito basados en la entrega de recompensa a la hora de captar financiación están muy fundamentados en la creación de valor, ya sea económico, tecnológico y especialmente social y cultural.
Por todo ello el punto clave está en diseñar correctamente como ofrecer esta recompensa para conseguir la financiación mediante crowdfunding de recompensa que necesitamos.
